La ralentización económica sigue trasladando sus efectos al mercado laboral, con descensos muy moderados del paro y menor afiliación

Favorecer la actividad empresarial es indispensable para que se fortalezca el incremento del empleo

El paro registrado ha bajado muy levemente en Aragón en noviembre reflejando la continuidad de la desaceleración de la actividad económica y, por tanto, del empleo cuyos efectos ya se advierten desde hace varios meses. El descenso mensual, respecto a octubre se queda en un -0,02%, equivalente a 12 personas; mientras que respecto a noviembre del año pasado la reducción es del -1,90% (1.261 personas), lejos de los datos que se producían en momentos de mayor dinamismo económico.

Con todo y a pesar de lo ocurrido en meses anteriores, Aragón mejora ligeramente los datos nacionales, puesto que en el conjunto de España el paro registrado creció un 0,65% en noviembre y su reducción interanual se quedó en el 1,68%.

Por sectores, el paro descendió respecto a noviembre de 2018 en todos los sectores salvo la Construcción, en la que se elevó un 3,26%. En la comparación mensual, se sumó al aumento la Industria, mientras que Agricultura, Servicios y el colectivo Sin Empleo Anterior experimentaron ligeros retrocesos.

En relación a las provincias aragonesas, la peor evolución porcentual se registró en Teruel, con aumento del desempleo tanto mensual (2,34%) como interanualmente (0,84%), mientras que el paro bajó en ambos términos en Huesca (-0,72% y -2,41%) y Zaragoza (-0,16% y -2,11%).

También es débil la evolución de la afiliación que, en la Comunidad Autónoma y sus tres provincias baja mensualmente, aunque crece en términos interanuales (2,04% en Aragón; 2,96% en Huesca; 1,98% en Zaragoza y 0,90% en Teruel.

En conjunto, los datos de la evolución del mercado laboral en noviembre siguen mostrando la progresiva moderación de su mejoría, que continúa, pero a menor ritmo, como ya venimos advirtiendo en los últimos meses. Esta ralentización, así como las previsiones económicas, hace imprescindible reflexionar sobre las políticas y medidas necesarias para favorecer la actividad de las empresas, de las que depende más del 80% del empleo tanto en Aragón como en el conjunto de España.

Fomentar su actividad resulta clave y requiere, entre otros aspectos, un marco normativo, fiscal y de costes adecuado, que refuerce su competitividad, crecimiento y capacidad de adaptación a la realidad de cada empresa y sector. A ello deben contribuir políticas económicas que generen estabilidad, así como la negociación y concertación a través del diálogo social en todo lo relativo al mercado laboral.