El recorte en las previsiones de crecimiento para España y Aragón muestra que deben reconducirse las políticas que inciden sobre empresas y empleo, cuyo efecto se traslada en negativo al crecimiento económico 

El paro registrado ha vuelto a la senda de reducción en noviembre, tanto en Aragón, con un -1,93% mensual y un -21,95% anual; como en España, donde el descenso frente al mes anterior alcanza el -2,28% y el -17,36% el interanual. 

Son datos positivos en un mes en el que habitualmente se producen subidas del desempleo y tras la ruptura de la tendencia de bajada en octubre. No obstante, deben tomarse con mucha cautela ante la gran incertidumbre económica internacional, la reducción de previsiones de crecimiento para España y Aragón, que aconsejan una revisión de las políticas que inciden sobre empresas y empleo, y la no publicación este mes de los datos de trabajadores y empresas afectados por ERTE, fundamentales para ver la situación completa del empleo en el sector privado.

En Aragón, las cifras de paro se han reducido este mes en Industria (-3,37%), Servicios (-2,01%) y la población sin empleo anterior, que incluye a parados de larga duración (-3,07%), mientras que ha aumentado en Agricultura (+1,07%) y Construcción (+0,33%). Todos los sectores han mejorado notablemente en desempleo frente a noviembre de 2020, aunque esta comparación aporta poca información, dada la situación epidemiológica y de restricciones en aquel momento. En el conjunto nacional, la bajada ha alcanzado a todos los sectores en términos mensuales y anuales.

Por provincias, la bajada mensual del desempleo la encabeza Zaragoza (-2,23%), seguida por Huesca (-1,52%), mientras que Teruel ha sufrido un leve aumento del paro del 0,27%.

La positiva reducción del paro convive en Aragón con el negativo descenso del número de afiliados a la Seguridad Social (-0,09%, equivalente a 510 personas), con la única subida del 0,02% en Zaragoza y frente al leve aumento en España (0,31%). 

La inminente apertura de las estaciones de esquí y del periodo navideño invita al optimismo para el próximo mes. Sin embargo, la prudencia debe ser máxima tanto por la nueva variante de Covid, ante la que hay que hacer una nueva llamada a la vacunación, como por la compleja situación en los mercados de materias primas, componentes, así como en el transporte internacional y con los costes energéticos.

Que los organismos internacionales y analistas rebajen sus previsiones de crecimiento para este año en España (también las últimas realizadas para Aragón) y la sitúen en el furgón de cola de los países de su entorno tampoco genera confianza y refleja el impacto negativo sobre la economía, las empresas y el empleo de políticas, medidas y anuncios que dificultan todavía más la actividad de las empresas tanto en el ámbito fiscal (con subidas de IRPF, Sociedades, Patrimonio, bebidas, servicios digitales… en este año y anuncios preocupantes para el próximo), como en el plano laboral, con planteamientos muy alejados de las necesidades empresariales y del acuerdo en el diálogo social hasta el momento. 

En este aspecto, cabe recordar que la temporalidad de los contratos en el sector público en Aragón es del 39,3% frente al 21,1% del sector privado, porcentajes situados en el 31,6% y 24,6% en España, según la última Encuesta de Población Activa (EPA). También preocupa que el empleo público esté creciendo muy por encima del privado, que continúa estando 11.000 ocupados por debajo del nivel prepandemia en Aragón (166.600 en España) frente a los 8.900 y 230.700 empleados públicos más, respectivamente, en Aragón y España.